El avión ha sido objeto de críticas debido a su elevado costo de compra y mantenimiento, así como a su escaso uso. Finalmente, el gobernador ha decidido deshacerse de él, valorado en 4,3 millones de dólares, considerando la posibilidad de venderlo o cederlo como parte del capital a la empresa del Grupo Vía Bariloche, que brinda servicios al gobierno provincial.
Además, la provincia debe hacer frente al pago de la cuota del Plan Castello, con vencimiento en abril. Aunque se consideró la opción de renegociar la deuda, el mandatario ahora asegura que se pagará en su totalidad.
Weretilneck explicó que los 47 millones correspondientes a la cuota semestral del plan serán financiados con recursos propios y un préstamo del Banco Patagonia.