Tras la decisión del Gobierno Nacional de eliminar los subsidios al transporte público, el Gobierno de Río Negro adoptó medidas urgentes para mitigar el impacto en usuarios y empresas concesionarias. La Provincia duplicó los subsidios a las líneas provinciales con prioridad en aquellas de función social, garantizando la continuidad de servicios esenciales.
Pese a que el transporte urbano no es su responsabilidad directa, la Provincia mantuvo el apoyo financiero a municipios como Bariloche, Viedma, General Roca, Cipolletti, Sierra Grande y San Antonio Oeste. Además, se reforzó el boleto estudiantil con un descuento del 50% en pasajes interurbanos y una tarjeta identificatoria en colaboración con universidades locales.
El ministro de Obras y Servicios Públicos, Alejandro Echarren, subrayó que estas acciones “reafirman el compromiso de Río Negro con la conectividad y un transporte accesible para todos”. También destacó que se han mitigado los efectos de las decisiones nacionales en el bolsillo de trabajadores, estudiantes y jubilados.
En febrero de 2024, tras el anuncio de la eliminación de subsidios nacionales, el Gobernador Alberto Weretilneck decidió continuar subsidiando transportes provinciales y municipales, distribuyendo 130 millones de pesos entre los seis municipios con servicios urbanos durante el año. Además, se incorporaron colectivos y nuevas frecuencias en el Alto Valle, financiados con recursos provinciales, para garantizar la conectividad pese a la disminución de servicios provocada por la política nacional.