Adorni formuló el anuncio en su habitual conferencia de prensa matutina ofrecida en la Casa Rosada, en la que reiteró que, por el efecto de la inflación, la aplicación de la Ley de Movilidad le representaría a los jubilados «una pérdida del poder adquisitivo de alrededor del 40%» en un trimestre.
«Eso no lo podíamos permitir», aseveró, al tiempo que remarcó que «haber echado por tierra la ley de Movilidad no es contra los jubilados sino para evitar que la inflación les termine por despedazar el ingreso».
Al respecto, aclaró que «lo que se va a hacer es recomponer esos salarios a través de decreto, porque no tenemos fórmula jubilatoria», si bien la normativa aún se encuentra vigente ya que no fue derogada ni suspendida por ningún acto administrativo.
«La idea es terminar con eso, a la espera de un nuevo mecanismo que no dependa de un decreto ni de la firma de un funcionario, pero claramente van a tener una recomposición», manifestó.