Este año finalizan los contratos de concesión de buena parte de las represas del Comahue (salvo la presa de Pichi Picún Leufú cuya concesión termina en el año 2029) y “nuestra provincia, junto con Neuquén plantea la necesidad de discutir su administración compartida, no obstante esta definición, en forma unilateral y sorpresiva, el gobierno nacional dispuso el traspaso del manejo de las represas, una vez caído el plazo de concesión, a la empresa estatal Enarsa (Energía Argentina SA)”, señalaron los legisladores
Cabe destacar que Hidroeléctrica Alicurá S.A.; Hidroeléctrica El Chocón S.A.; Hidroeléctrica Cerros Colorados S.A.; Hidroeléctrica Piedra del Águila S.A; Hidroeléctrica Pichi Picún Leufú S.A.), se construyeron y entraron en operaciones entre 1972 y 1999. Se financiaron con créditos internacionales tomados por los gobiernos nacionales, avales del Tesoro y con los recursos aportados a través de las facturas del servicio eléctrico del país con los recargos tarifarios que se destinaron a las cuentas del “Fondo de Grandes Obras Hidroeléctricas” y del “Fondo Energético El Chocón- Cerros Colorados” y con la marea neoliberal de los años 90, dejaron de estar en la órbita del Estado y fueron concesionadas por un período de 30 años a distintas operadoras privadas.