
Después de más de una semana de juicio oral, la Fiscalía pidió ayer que se condene al exintendente de Fernández Oro, Oscar Reggioni, por peculado, falsificación de documentos y administración fraudulenta. Lo acusan de haber recibido más de 5,4 millones de pesos para construir 12 viviendas, pero no cumplir con la obra ni con el resto del convenio que firmó con Nación.
Según la acusación, Reggioni desvió el dinero a otra cuenta bancaria, ocultó fondos, falseó rendiciones y usó los nombres de supuestos beneficiarios para justificar gastos. La Fiscalía afirmó que seis de las casas nunca se construyeron y que las otras tampoco se terminaron. Todos los beneficiarios declararon como testigos en el juicio.
También pidieron condenas para una excolaboradora del intendente y dos responsables de cooperativas involucradas. Un cuarto imputado, en cambio, podría ser absuelto.
Durante los alegatos, el fiscal jefe remarcó que hubo “una contabilidad paralela” y que el exintendente “tuvo dominio total del dinero, violó todas las cláusulas del acuerdo y traicionó la confianza del pueblo”.
La defensa, en cambio, habló de persecución política, negó las irregularidades y pidió la absolución de los acusados. Sostuvo que no hubo dolo y que sólo faltaba un último desembolso para completar el plan.



