
El proyecto de ordenanza aprobado ayer en primera vuelta establece la enajenación para una posible venta de cuatro terrenos: tres de ellos correspondientes a reservas fiscales del Municipio situados entre Costanera Norte y barrio Jardín; y una reserva verde en el barrio Don Bosco, para financiar bienes de capital.
Durante la sesión, la concejal que rechazó el proyecto oficial cedió su banca a un grupo de vecinos para exponer sobre el proyecto de enajenación de tierras fiscales y espacios verdes. Ante esta iniciativa, el oficialismo y otros concejales votaron en contra de la moción, desbaratando así la puesta en escena de Scavo, que pretendió saltear los canales institucionales previstos para la participación ciudadana en la discusión de leyes.
La propia presidenta del Deliberante, Maricel Cévoli, fue la encargada de llevar orden a la sesión asegurando que “respeto muchísimo las expresiones de todos los vecinos y vecinas, y sobre todo de aquellos que tienen un trabajo realizado en distintas áreas; por eso, les solicitamos a aquellos que quieran hacerlo, lo realicen de manera formal para poder convocarlos a la próxima Labor Parlamentaria y así, dialogar sobre el proyecto. De esta forma, garantizo el cumplimiento de lo acordado con todos y todas las miembros del cuerpo legislativo municipal en la Labor Parlamentaria de ayer”.
Otro de los que defendió la iniciativa que llegó recinto con previo acuerdo de comisiones fue el edil del Frente de Todos, Luciano Ruiz, quien remarcó que “debemos ser claros. No emitamos un mensaje incorrecto a nuestra ciudadanía de que acá sale un proyecto que no está trabajado, porque no solo se trabajó, sino que hubo acuerdo en la Comisión de Gobierno”.
Por último, expresó que “para honrar a la verdad, no ha llegado ninguna solicitud formal de los vecinos y vecinas pidiendo información o dialogar con concejales o concejalas sobre este proyecto”.